Entre el 6 y el 8 de junio el Grupo de las ocho naciones más enriquecidas
del planeta (G8) se reunirá en Alemania. A partir de inicio-mediados de
mayo varias “Euromarchas contra la precariedad y la exclusión” arrancaron
en diferentes puntos del continente. La propuesta nació el año pasado
durante el Foro Social Europeo de Grecia.
Las movilizaciones, que partieron de Polonia, Francia, Bélgica, Holanda y
de diferentes lugares de Alemania convergerán unidas en Heilligendamm,
-cerca de Rostock-, Lugar donde se realizará la movilización contra el
“G8” el próximo sábado 2 de junio. Los organizadores especulan reunir al
menos 100 mil personas llegadas de toda Europa. Apuestan así a que se
convierta en la principal manifestación alter-mundialista del año 2007 en
el Viejo Mundo.
El Grupo de los 8 (G8) reúne a las siete naciones más industrializadas del
planeta y a Rusia. En la cumbre anual a realizarse del 6 al 8 de junio en
Heilligendamm, pequeña ciudad balnearia del Mar Báltico, se encontrarán los
jefes de Estado o de Gobierno de Alemania, Francia, Italia, Estados Unidos,
Japón, Gran Bretaña, Canadá y Rusia.
Solidariedad con los mas desprotegidos
La etapa helvética de una de las ramas de la Euromarcha contra la
precariedad y la exclusión, entró el sábado 19 de mayo en Suiza desde
Francia. Más de 500 personas animaron el recorrido que el día siguiente
continuó hacia Nyon.
La misma, recorre el país durante una semana para salir, el sábado 26 de
mayo hacia Alemania, por la zona fronteriza de Basilea. “Allí planeamos un
pasaje simbólico de la frontera cerca de una prisión de retención -para
extranjeros en situación irregular-, lo que nos permite denunciar la
política migratoria restrictiva europea”, explica Florence Proton,
coordinadora de ATTAC Suiza (Asociación a favor la Tasa Tobin para los
capitales especulativos).
Según la joven dirigente social, esta iniciativa “es la continuidad de
acciones similares impulsadas ya en 1997 en todo el continente, retomadas
luego en 1999 durante otra movilización anti-G8”. El objetivo principal de
esta convocatoria es “darle una voz a la gente excluida de la sociedad”,
sostiene.
Según estimaciones de la organización no-gubernamental Caritas un 15 % de
la población europea vive en estado de pobreza. Según cifras del segundo
informe de esa ONG, en Gran Bretaña, el 20 % de la población más pobre
comparte el 6.1 % del ingreso o del consumo. En tanto el 20 % más rico se
adjudica el 43.2 % del ingreso o del consumo
La lucha contra la precariedad es por lo tanto un eje esencial de los
movimientos sociales del continente. Tal como lo subraya Alessandro
Pelizzari, representante de UNIA, la principal organización sindical
helvética que cuenta con unos 200 mil afiliados y que sostiene las
Euromarchas.
“La lucha contra la marginalidad social es un objetivo de nuestra
organización quien evalúa en 700 mil la cantidad de personas que hoy en
Suiza viven con salarios precarios”, argumenta Pelizzari.
La participación de su sindicato en la Euromarcha se inscribe “en una
propia iniciativa lanzada para el 2007 por un trabajo digno, contra el
trabajo temporal y el trabajo por llamada, según la necesidad de la empresa
y sin compromisos contractuales fijos”, explica.
Protesta helvética
Si bien sólo algunas decenas de participantes hacen todo el recorrido
durante la semana, numerosos actores sociales participan, de una u otra
manera, en el trayecto helvético de la Euromarcha.
Entre los promotores, además de UNIA y ATTAC, se encuentran diversas
organizaciones de trabajadores sin estatus legal, conocidos como “sin
papeles” y de inmigrantes; asociaciones de desempleados auto-organizados
(como la KABBA de Berna), así como la “Lista 13” de Basilea, contra la
pobreza y la marginalidad.
Comedia, el sindicato de medios de comunicación; varias sesiones cantonales
-provinciales- del Partido Socialista; organizaciones de izquierda; el Foro
Social de la región Lémanique; Ingenieros del Mundo y la Plataforma por una
agricultura socialmente durable, también apoyan esta iniciativa.
La apertura del recorrido, el sábado pasado en Ginebra, incluyó una
manifestación simbólica ante la sede de la Organización Mundial del
Comercio (OMC). El trayecto incluyó Nyon, la región de Lausana, así como
Friburgo, donde el jueves 24 se realizó una movilización contra la guerra
en Irak. Luego de pasar por Berna, la capital, el viernes 25 de mayo,
concluirá su trayecto helvético en Basilea.
Temas sociales
Uno de los principales actores de esta convocatoria en Suiza son las
organizaciones de inmigrantes, sin papeles, y contra el racismo.
“La presencia de las asociaciones *migrantes* en la lucha contra el G8 es
esencial…y parte de analizar el rol económico de la migración en el mundo
globalizado actual”, enfatiza Sébastien Franco, co-presidente del Centro de
Contacto Suizo/as-Inmigrantes y miembro de SOS-Racismo de Friburgo.
Es evidente, insiste, que los actores de la migración -los inmigrantes- ,
son el último eslabón de la cadena de precariedad y de exclusión que
amenaza a todos los trabajadores. “Y por ello es importante la solidaridad
a construir entre unos y otros”, enfatiza.
Concepto de fondo presente a la base misma de la marcha que recorre Suiza y
Europa. “Es esencial reapropiarse de los temas sociales y reconstruir una
solidaridad activa” entre las víctimas de la precariedad, tal como lo
subraya Florence Proton de ATTAC.
Una visión de sociedad que va mucho más allá de esta protesta contra el G8,
pero que encuentra en la próxima reunión de las naciones más enriquecidas
del planeta en Alemania, un catalizador para hacer escuchar sus propias
reivindicaciones.
Sergio Ferrari, desde Berna, SUIZA