Todos sabemos que la contaminación del aire es la principal causante de cambios en el clima. Lo que mucha gente no sabe es que los medios de transporte son los principales responsables de toda esa contaminación. Sí, no son las chimeneas de las fábricas las grandes villanas de esta historia, sino los escapes de los automóviles, camiones y ómnibus que circulan por las ciudades todos los días. Juntos, los medios de transporte son responsables por el 20% de las emisiones de todo el mundo. ¿Y ahora? ¿¡Será que la solución a los problemas climáticos es andar a pie o en bicicleta?! ¡Si y no!
Uno de los side events más concurridos durante la COP18 fue sobre Transporte Sustentable. Durante el panel fue presentado el caso de México, que tiene su capital – Ciudad de México – como una de las más grandes y más pobladas del mundo. Luis Muñozcano Alvarez, Director General de Políticas de Cambio Climático en México mostró, por ejemplo, como el incentivo al uso del transporte público puede ser una buena solución para que las personas dejen su auto en casa. En la ciudad de México crearon el Bus Rapid Transit, que en otros países es conocido como corredores de ómnibus. Con ese sistema, los buses pasaron a circular mucho más rápido que los automóviles y la población pasó a priorizar este tipo de modalidad de viaje. La ventaja que esta iniciativa trajo no fue sólo en cuestión de movilidad, sino también en toda la transferencia de tecnología y conocimientos con países desarrollados.
Pero andar a pie continua siendo una buena (para no decir perfecta) solución. “Si piensas bien, todo viaje comienza con una caminata”, recordó Phillip Turner de la UITP – International Association of Public Transport. “Uno camina para ir hasta el auto, camina para ir hasta la parada del bus, etc.” Por eso, según Turner, además de transporte público, las ciudades necesitan invertir en mejores condiciones para que las personas caminen más. Él mostró el caso de Buenos Aires, que después de construir grandes veredas en el centro de la ciudad como parte de su programa de priorización del peatón, consiguió reducir en un 97% los niveles de emisión de CO2 en la región central de la ciudad.