Traducido por Francisco García Fonseca
Durante la jornada de clausura del Foro Social Mundial 2011 se celebró un evento promovido por el Foro de São Paulo (FSP) junto a partidos de izquierda de Sudáfrica y Senegal. Además de compartir las experiencias de la iniciativa latinoamericana, el seminario demostró una clara intención de acercar a las izquierdas de ambos continentes.
Por la gran patria
Valter Pomar, miembro del Partido de los Trabajadores (PT) y Secretario Ejecutivo del FSP, resumió la historia del Foro. Desde el punto de vista latinoamericano, la actuación del Foro se puede dividir en tres períodos. De 1990 (año de fundación del FSP) a 1998 encontramos una fase de hegemonía neoliberal en la que los movimientos sociales resistieron frente al intento de homogeneización y eliminación de la lucha social en el continente.
A partir de 1998 el panorama comenzó a cambiar: los partidos de izquierda comenzaron a ganar elecciones presidenciales en América Latina – el primero fue Hugo Chávez en Venezuela; posteriormente se consiguirían sendas victorias en Brasil, Argentina, Uruguay, Paraguay, Bolivia, Ecuador, Nicaragua y El Salvador.
“Estos gobiernos, sumados a los de Cuba, Chile, Guatemala, Honduras y República Dominicana, crearon una situación sin precedentes en América Latina”, apuntó Pomar, reseñando también que países importantes como México, Colombia y Perú permanecieron gobernados por la derecha. Según el miembro del PT, este cambio político se tradujo en una mejora de la calidad de vida de los ciudadanos en los países gobernados por la izquierda, así como en una mayor democratización, fortalecimiento de la soberanía nacional y avances en la integración regional.
La tercera fase se inicia en 2009. Desde ese año la izquierda no ha ganado elecciones en ningún país nuevo, incluso ha perdido en algunas ocasiones frente a la derecha. Es el caso de Honduras, donde se produjo un cambio de gobierno mediante un golpe de estado, o el de Chile, a través de elecciones. “Podemos constatar un contraataque por parte de la derecha en el continente, que cuenta con el apoyo de los gobiernos conservadores europeos y el estadounidense”, señaló. Según Pomar, EEUU busca recobrar su influencia en la región en medio de este clima de crisis internacional.
En la coyuntura actual son tres los objetivos del FSP: mantener los espacios conquistados, acelerar el proceso de integración regional y cosechar nuevas victorias. “Sin embargo hoy en día es difícil avanzar, ya que la crisis y la militarización generan una gran inestabilidad”, argumentó Pomar.
La estrategia no es otra que mantener a la izquierda en el poder en los estados latinoamericanos ya gobernados por fuerzas progresistas y realizar intercambios entre el Foro y las izquierdas africana, asiática y europea. “Hablamos de intercambios porque las realidades son muy diferentes”, indicó el secretario. Con ello se implementa otro objetivo, el de garantizar la pluralidad, característica que según Pomar explica el éxito del Foro en América Latina.
África unida
Foto – Chris Mathlako compartió la experiencia de ALEF
En 1958, el primer ministro de Ghana, Kwame Nkrumah, convocó a representantes de 20 estados africanos para un celebrar un encuentro en su país. Para él, la independencia de su nación no serviría de nada mientras que los demás países africanos permanecieran colonizados. El año pasado supuso la segunda vez en la historia que todas las regiones de África han estado representadas para debatir su integración. El encuentro fue convocado por el Partido Comunista Sudafricano (SACP – South African Communist Party) y tuvo lugar en Johannesburgo, en agosto de 2010, reuniendo a 17 naciones africanas.
“El encuentro tuvo como objetivo debatir las experiencias y desafíos de la izquierda africana en la implementación de la democracia participativa, además de fortalecer el foro ALNEF (African Left Network Forum)”, explicó Chris Mathlako, integrante del SACP y coordinador de ALNEF, el Foro de la Izquierda Africana.
Al igual que Nkrumah, Mathlako defiende que los avances deben extenderse por todo el continente, o de lo contrario no se podrán sustentar. “ALNEF surge para reunir, además del conjunto de partidos africanos de izquierda, los movimientos y organizaciones sociales. Es una nueva fuerza”, aseveró.
En el encuentro de Johannesburgo se acordó la convocatoria anual del foro africano. Asimismo se creó una secretaría y se convocó para febrero la primera actividad sectorial: una conferencia titulada “Mujeres en África”. Mathlako enfatizó la intención que ALNEF tiene de estrechar el diálogo con el Foro de São Paulo para fortalecer el apoyo mutuo y acercar las luchas sociales de ambos continentes.