El Tribunal Criminal de Ginebra, condenó este viernes 6 de junio a vida al represor guatemalteco Erwin Sperisen. El ex jefe de la policía nacional civil de Guatemala, fue reconocido este viernes 6 de junio co-autor de seis asesinatos y responsable directo de uno durante una acción represiva implementada en la cárcel de Pavón, en ese país centroamericano, en el 2006.
Al pronunciar la sentencia los jueces señalaron la motivación egoísta y particularmente odiosa así como el método de actuación de Sperisen. Subrayaron también la gravedad de los hechos, el número de las víctimas y la ausencia de cualquier tipo de reconocimiento de los hechos por parte del acusado.
Los siete detenidos fueron víctimas de ejecuciones extrajudiciales, insistió el Tribunal Criminal, basándose en numerosos testimonios considerados creíbles. El único argumento de la defensa fue afirmar que los testigos mentían.
Sperisen, fue blanqueado de la otra causa, la del asesinato de tres fugitivos de “El Infiernito” en octubre del 2005, luego de la evasión de 19 presos. Sperisen y sus colegas implementaron el Plan Gavilán con el objetivo de atrapar a los evadidos y ejecutarlos, disimulando pruebas. Tres de los recapturados corrieron esa suerte. La justicia ginebrina consideró que no había elementos suficientes en este caso para inculpar al ex jefe policial.
La condena a prisión perpetua de este viernes cierra la última etapa del proceso que incluyó, desde el 15 de mayo pasado, las presentaciones de la fiscalía y la defensa. Tres semanas de un verdadero maratón jurídico que ocupó la principal atención mediática en Suiza.
El juicio y la sentencia marcan un precedente significativo en la lucha internacional contra la impunidad. Sperisen, doble ciudadano suizo y guatemalteco había huido de ese país centroamericano en el 2007 radicándose en el cantón de Ginebra, donde se había “reconvertido” como militante del Partido Evangélico.
La denuncia y la presión de varias organizaciones sociales y de solidaridad helvéticas llevaron a que las instancias judiciales ginebrinas iniciaran el proceso. Entre las más activas denunciantes se encuentran la Comunidad Ginebrina de Acción Sindical, la Acción de los Cristianos por la Abolición de la Tortura y el sindicato rural UNITERRE (miembro de Vía Campesina). La organización internacional TRIAL, sistematizó la causa y la relanzó en el 2010.
El ex – jefe de la policía guatemalteca fue detenido el 31 de agosto 2012 luego de haber gozado de libertad total a partir de su instalación en dicho cantón en 2007.
“El Vikingo”, fue también acusado por la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) de haber sido uno de los jefes de los escuadrones de la muerte que operaron en el país centroamericano entre julio del 2004 y marzo del 2007.
Dicha Comisión es un organismo establecido conjuntamente por las Naciones Unidas y Guatemala en el 2007. La Comisión comprobó la existencia en esos años de un “Grupo Criminal Autónomo” integrado por 19 personas que operaba con total impunidad. Todos eran funcionarios de los servicios de Seguridad del Estado o fuerzas aparentadas y habrían implementado ejecuciones extra judiciales de prisioneros.
En marzo del 2007 Sperisen debió renunciar a su cargo dado que el cuerpo policial que dirigía se vio involucrado en el escándalo resultante del asesinato en Guatemala de tres diputados salvadoreños, miembros del Parlamento Centroamericano.
Dado que Sperisen cuenta con la doble nacionalidad, Suiza no acepta la eventual extradición a Guatemala para un proceso. De ahí la trascendencia del veredicto de este 6 de junio. Un desafío no solo para la justicia helvética sino también en el combate internacional contra la impunidad.