Comunicación y ciudadanía en América Latina

“La gran mayoría de los medios de comunicación en América Latina están en manos de sectores de poder privilegiados, lo cual ha impedido que la población ejerza sus derechos ciudadanos, expresó el comunicador y docente paraguayo Ilde Silvero, al exponer en el panel Comunicación y Ciudadanía, que tuvo lugar el jueves 26 de agosto, en la Pontificia Universidad Católica de Perú.

En el evento participaron también el periodista y docente brasilero Elson Faxina, y la Secretaria del Consejo Consultivo de Radio y Televisión de Perú, Mirian Larco.

Según Ilde Silvero, a lo largo de 200 años han existido afanes de construir ciudadanía, en medio de dificultades por la hegemonía de grupos de poder económicos y políticos, muchos de ellos dictatoriales, que han impedido la expresión libre de la población. No obstante, reconoció, América Latina vive una nueva época, con realidades políticas distintas y diversas, con varios gobiernos que se identifican con la izquierda y que buscan dar mayor participación para sectores populares, aunque también se advierte que la derecha, que en principio se había replegado un poco, va reorganizándose nuevamente para recobrar el poder, como en el caso de Chile.

Destacó que en los procesos en construcción de ciudadanía hay avances y retrocesos. En América Latina hay una enorme brecha entre pobreza extrema y concentración de la riqueza, dijo. Por otro lado, la lucha por reducir la pobreza es lenta, y en algunos casos hay retrocesos, como en Paraguay, puntualizó.
El periodista paraguayo, que preside la Asociación de comunicadores católicos de Paraguay y es decano de la Facultad de Filosofía y Comunicación de la Universidad Católica de Asunción, señaló también que los medios de comunicación están en manos de sectores privilegiados, por tanto su línea de opinión favor a los sectores que pertenecen. El contenido de los medios de grupos empresariales tienen información identificada y contaminada, frente a lo cual hay propuestas para favorecer acceso de medios a sectores marginados y excluidos, relievó. Insistió que en el campo de la comunicación se expresa una disputa de espacios de poder de los medios, y en esa disputa se dicen medias verdades.

Agregó, no obstante, que hay propuestas de centros de estudio, gremios, movimientos sociales e iglesias que demandan procesos de democratización de los medios, y paralelamente en varios países hay esfuerzos por aprobar leyes de comunicación, aunque señaló que hay preocupaciones sobre a quién se concede potestad de aplicar sanciones, aprobar licencias. Se debe tener cuidado en decidir a quién se concede las facultades de regular y controlar el derecho a la comunicación, pues no puede dejarse este poder en una instancia gubernamental, porque hay el riesgo de volver a modelos en que el poder gubernamental controla todo y decide a quien clausura o no, enfatizó.

América Latina es el continente en donde subsiste la situación de injusticia, pobreza, por lo que “nuestro norte debe ser analizar cuál es la mejor forma de eliminar estas desigualdades y promover una comunicación solidaria y democrática”, dijo Silvero.

Inclusión ciudadana en la comunicación

Por su lado la docente peruana Mirian Larco, Secretaria Ejecutiva de Concortv, explicó el camino recorrido en Perú para la probación de la ley que creó el CONCORTV, como un órgano consultivo, no sancionador. Según dijo, el Consejo tiene una conformación multisectorial que tiene representación de la Asociaciones de consumidores, Consejo de la Prensa Peruana, Facultades de Comunicación Social y Periodismo, Colegio de Periodistas del Perú, Asociación Nacional de Centros, pero también del Ministerio de Transportes y Comunicaciones, de la Radio y televisión comercial, de la Radio y televisión educativa, de la Asociación de Anunciantes y del Colegio de Profesores del Perú.

Aunque reconoció que la ley no es perfecta, comentó que el antecedente para lograr su aprobación fue la situación de autocensura, corrupción, campañas de desinformación, desprestigio, ausencia del pluralismo informativo, que caracterizaba la realidad comunicacional en Perú, por lo que la población reclamaba una regulación que busque dar una mayor participación a la ciudadanía.

Este Consejo -dijo- concibe a los ciudadanos no solo consumidores de radio o TV, sino ciudadanos y ciudadanas en comunicación.

Explicó las desigualdades que subsisten en la estructura de propiedad de los medios. Según dijo, en Perú existen 2326 estaciones de radio y 1083 estaciones de TV (361 en UHF y de 722 en VHF) a nivel nacional. De este universo en la radio, el 77% son estaciones comerciales, el 23% educativas, y 0% comunitarias; mientras tanto en la TV 61% son comerciales, 31% educativas, y 0% comunitarias.

Destacó que el Estado ha aceptado algunas observaciones del CONCORTV, para evitar la censura, en el caso de una emisora de Bagua a la que se le quiso silenciar por cumplir su misión informativa.

Democratización de la comunicación

Finalmente, el comunicador brasilero Elson Faxina, destacó que en la sociedad es evidente la vigencia de dos sistemas que impiden el ejercicio de una ciudadanía: la desigualdad y la exclusión. La desigualdad, como un fenómeno socioeconómico, y la exclusión como un fenómeno cultural, un fenómeno de civilización. Por lo que la ciudadanía es todo un proceso de lucha en contra de la exclusión y la desigualdad, lo que quiere decir que es una lucha político-económica y político-cultural.

Dijo que los grandes medios trabajan en el ámbito de la exclusión, pero no en el ámbito de la desigualdad.
Para entender la dimensión de la ciudadanía que necesitamos es necesario analizar qué modelo de democracia, si la democracia representativa que concibe a la ciudadanía como un regalo del estado, o la democracia participativa que comprende a la ciudadanía como construcción social, destacó.

Faxina dijo que el Estado experimental debe asegurar no solo la igualdad de oportunidades entre los distintos proyectos de institucionalidad democrática, sino unas pautas mínimas de inclusión que hagan posible una ciudadanía activa capaz de controlar, acompañar y evaluar la valía de los distintos proyectos.

En el ámbito de la comunicación, señaló que la Constitución Brasileira considera la constitución de un sistema complementario de radio y televisión entre el sector privado, el público y el estatal, de suerte que todos existan en condiciones de igualdad, no de reserva de mercado, como acostumbra acontecer.

Según insistió, no habrá democracia mientras la esfera privada (mercado) tenga hegemonía sobre toda la comunicación, dejando la esfera política (Estado) y la esfera civil (sociedad civil organizada) a merced de su interpretación.

Destacó el esfuerzo gubernamental por debatir y democratizar la comunicación, para lo cual se convocó y se realizó una gran conferencia nacional de Comunicación, Confecom, que contó con una multitudinaria participación de comunicadores, docentes, investigadores, pero sobre todo ciudadanos y ciudadanas interesados en promover una democratización de la comunicación.

Citando a la filósofa española Adela Cortina, señaló que la ciudadanía es una síntesis de justicia (aspecto jurídico) y de pertenencia (dimensión de sentirse parte de una sociedad).

Una ciudadanía construida a partir del diálogo, de la negociación, no se restringe a las dimensiones políticas y no queda restringida a las dimensiones comunitarias, sino que alcanza la dimensión socio-cultural: género, raza, étnica, ecología, grupal, educación, vivienda, tierra, dijo. La ciudadania se construye en la multiculturalidad.

Recordando a  Jesús Martín-Barbero enfatizó que los dos derechos de las comunidades son el derecho a una información en la que predomine el interés común sobre el del negocio; y el derecho a la expresión en los medios masivos y comunitarios de todas aquellas culturas y sensibilidades mayoritarias o minoritarias a través de las cuales pasa la ancha y rica diversidad de la que están hechos nuestros países.

Al referirse al trabajo periodístico en América Latina, Elson Faxina enfatizó en la urgencia de cambiar nuestros ejes narrativos. Hay que saber que no somos solo hacedores de reportajes, productores de noticias, de programas de radio o de televisión. Somos constructores de sociedad. Y los materiales de nuestra construcción son las noticias, los programas, los videos, señaló.

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